— Con vos puedo ser quien realmente soy. No importa si no me parezco a una princesa, porque vos me amás así, desprolija, rebelde y pervertida.
Yo amo tus ojos, tu sonrisa, tu forma de ser, tu voz, y amo que ames cómo soy.
Y eso es lo que te hace perfecto. O al menos, perfecto para mí.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
¿Te causó algo? ¿Gracia, odio, empatía, tristeza? Dejame tu comentario, hacémelo saber y compartamos opiniones. No por nada tenemos criterio.